Colonias felinas controladas en Navalafuente
En el año 2017 se inició el Programa de Creación y Consolidación de Colonias Controladas de Gatos Urbanos. El Programa se inició con el objetivo de controlar la superpoblación de gatos urbanos, considerando razones de sostenibilidad y bienestar animal, en colaboración con el Centro Integral de Acogida de Animales de la Comunidad de Madrid, a través de procedimiento de captura, esterilización y suelta y con la labor inestimable y desinteresada de los voluntarios de las colonias.
Una colonia controlada es un grupo de gatos silvestres-urbanos, esterilizados quirúrgicamente, que conviven en un espacio público o privado, y que son controlados sanitariamente, a través de la asistencia del servicio VETERCAM de la Comunidad de Madrid o de servicio veterinario a cargo del Ayuntamiento de Navalafuente.
Los objetivos perseguidos con esta actuación consisten en:
- Eliminar o reducir los problemas que puedan surgir, de tipo sanitario y de salud pública, asociados a la presencia de gatos urbanos no controlados.
- Estabilizar el tamaño de las colonias, evitando su reproducción y disminuyendo el volumen de animales ingresados en los centros de acogida.
- Favorecer la colaboración de los colectivos de alimentadores controladores.
- Mantener el estado de salud de los animales y mejorar su calidad de vida.
- Facilitar la convivencia entre ciudadanos y animales, evitando molestias como ruidos por peleas o controlando plagas como las de roedores.
Con la aplicación de método CES (captura-esterilización-suelta) se consigue una disminución del tamaño de las colonias de gatos urbanos de manera natural y eficaz. Asimismo, permite que aumente la calidad de vida de los gatos.
Estos animales son identificados a través de la implantación de un Microchip, siendo propiedad de Comunidad de Madrid.
La pieza fundamental del programa es la figura del voluntario/colaborador, autorizado por el Ayuntamiento, y de forma desinteresada se compromete a ocuparse de alimentar de manera correcta a la colonia, para evitar malas prácticas de alimentación, y de controlar la inmigración, detectando la incorporación de nuevos ejemplares para su control sanitario y esterilización.
